Un viaje inolvidable

Las Cataratas del Niágara, un exuberante monumento de doble nacionalidad

CEn el mundo existen cientos de paisajes naturales, pero cada uno tiene su encanto y su esencia en particular. Tal es el caso de las Cataratas del Niágara, que están conformadas de tres impresionantes cascadas situadas en la frontera de Canadá, en Ontario, y New York.

Este exuberante monumento de la naturaleza está formado por tres cataratas que nacen del río Niágara. Los saltos de agua se denominan Horseshoe Falls, American Falls y Bridal Veil Falls, nombres que resultan tan curiosos, pero que se deben a cada uno de sus aspectos.

La altura de las Cataratas del Niágara no es destacable si se compara con la de otros saltos de agua. Solo alcanzan los 52 metros, en comparación con los 979 metros de la catarata más alta del mundo: el Salto Ángel en Venezuela.

Las ciudades más cercanas para llegar a las Cataratas del Niágara son Buffalo y St. Catharines, en Canadá, pero también es posible llegar fácilmente desde dos metrópolis próximas. Una de ellas es New York, que se encuentra a unos 650 kilómetros de distancia. Por otro lado, Toronto se encuentra más cerca, a tan solo 130 kilómetros.

Gracias al desarrollo y a la variedad de las zonas circundantes, hay muchas cosas interesantes que ver durante una visita a las Cataratas del Niágara. Una opción es contratar un viaje organizado, mientras que los más valientes que no teman mojarse disfrutarán enormemente en una visita en barco. Al preparar un viaje a las cataratas, es importante no olvidarse de incluir una visita a las islas Goat Island, Three Sisters Island y Luna Island, que se encuentran cerca de esta zona, en pleno río Niágara. Aunque todas son muy pequeñas y están deshabitadas, se pueden disfrutar desde un punto de vista exclusivo.

Este monumento de la naturaleza está formado por tres cataratas que nacen del río Niágara 

Del lado canadiense
La “doble nacionalidad” de las cataratas y del río Niágara permite contemplar un espectáculo natural desde dos países. Es posible por un momento desorientarse, ya que ambas ciudades a orillas se llamen “Niagara Falls”.

La población canadiense, que forma parte de la región de Ontario, recibe el sobrenombre de “Las Vegas” debido a sus numerosos casinos y centros de ocio. Esto permite probar suerte con los juegos de azar después de recrearse con la naturaleza.

Además, en el centro de la ciudad se encuentra el parque Queen Victoria, famoso por las composiciones florales realizadas con rosas y narcisos que adornan de vez en cuando el césped. Después de familiarizarte con la flora, se puede conocer la fauna en el Bird Kingdom, uno de los parques ornitológicos más grandes del mundo, con 350 especies de aves procedentes de todo el planeta.

Del lado estadounidense
La población estadounidense también conocida como “Niagara Falls”, en cambio, es más pequeña. Aquí los turistas se pueden entretener visitando los parques que rodean la ciudad, donde podrán conocer la flora típica del nordeste americano, con numerosos ejemplares de roble y especies similares.
Al anochecer, se pueden contemplar las cascadas engalanadas para la ocasión. Desde la puesta de sol hasta la medianoche, cientos de luces de colores iluminan los saltos de agua, que permiten disfrutar de una velada inolvidable.

Por: Beatriz Oliva
Foto: Sergey Pesterev / Unsplash