Excarlet Molina
Le encanta conectar con la gente
Es casi imposible esconder una sonrisa cuando se habla con Excarlet Molina. Su personalidad burbujeante arropa la sala y las personas en ella y es que, haciendo honor a su gentilicio, Excarlet es una dominicana que sabe gozar la vida. Su trabajo empieza muy temprano, pero no le molesta pues cada día entra en un estudio de radio a vivir su pasión: comunicar, entretener e informar, los pilares de su trabajo.
Desde ESTYLO Magazine conversamos con Excarlet desde New York y nos contó sus inicios en el medio y cuáles son sus proyecciones para el futuro.
¿Cómo es un día en la vida de Excarlet Molina?
Bueno un día conmigo es levantarse a las 3:45 de la mañana. Es levantarse supertemprano porque trabajo en la emisora número 1 del área interestatal, 97.9 en El Vacilón de la Mañana, y el show empieza a las 6 de la mañana, hasta las 11, por lo tanto, me toca madrugar. Me levanto hacia las 3:45, ya a las 4 estoy en pie, empezando a prepararme: qué maquillaje, qué peinado, porque tenemos cámaras en el estudio. Empezamos la mañana así, cinco horas de show, más si tenemos que grabar oficiales, si tenemos algún tipo de meeting, de reunión con uno de los jefes o algún cliente de la emisora, tenemos que quedarnos ahí.
Gimnasio o algo que tenga que hacer, ya sea buscar ropa para la semana, o algo que tenga que grabar, porque trabajo con varias marcas. Y así va mi día, y lo más importante es comer con mi familia, eso está en mi día a día: comer con mi papá y con mi mamá y sentarme por lo menos una hora a ver noticias con ellos, dedicarles mi tiempo a mis viejos. Ese es mi día.
¿Qué es lo que no puede faltar en tu vida?
Me la pones difícil. Hay dos cosas esenciales: el celular, y diré por qué, nada material «ah si las redes». No. El celular porque es mi fuente de trabajo, siempre ando con mi celular como trabajo en los medios de comunicación es muy importante estar actualizado con todo lo que pasa en las redes sociales, con las diferentes noticias de plataformas que puedo tener en mi celular.
Trabajar a través, por ejemplo, del chat de WhatsApp que tenemos con el equipo de El Vacilón de la Mañana, siempre tenemos que estar conectados. Es mi medio de comunicación más efectivo e importante. Mi agenda, mis videos, todo está ahí, todo el contenido que voy haciendo cada día está en mi celular. Y también, nunca puede faltar en mi vida un snack, una comidita en la cartera. Yo como mucho.
A los 9 años empezaste a trabajar en los medios, ¿en ese momento ya sabías que esto era más que una pasión?
Sí, empecé desde pequeñita. Mi primera oportunidad se dio en Santiago, en República Dominicana, en un programa infantil llamado Kanquimanía. Ahí empecé desde pequeña a bailar y se vino la primera oportunidad de tomar un micrófono, de hacer un segmento, por el que yo duré una semana completa practicando todo lo que iba a decir y en el momento que me tocó ir al aire, mi amor, los nervios a los 10 años me traicionaron, pero me sirvió de mucho porque ahí entendí que era mi pasión. Desde pequeñita siempre me vi en este mundo.
Pero en ese momento, cuando me equivoqué fue que yo dije esto es lo que me gusta, quiero aprender y quiero ser una de las mejores, desde los 9 años -ya tengo 28- he estado en este medio haciendo teatro musical, teatro, música, canto, bailo, todo ese tipo de artes que tienen que ver con el medio lo he hecho. Creo que siempre ha sido mi pasión: comunicar, estudiar, graduarme y hoy en día realizar El Vacilón de la Mañana radio, aquí en New York.
Cuéntanos de tu llegada a Estados Unidos
Llegué cuando tenía 17 años, tomé una decisión a los 18 de quedarme aquí en el país. Estudiaba en la universidad en Santiago, en República Dominicana, pero tomé la decisión de marcharme de mi tierra. Una decisión muy difícil porque toda mi vida la pasé en República Dominicana, estaban mi familia, mis amistades, todo mi apego es en República Dominicana. Fue muy difícil al principio, pero entendí en ese momento que mis sueños, lo que quería proyectar y lograr estaba en este país y aunque la decisión en el momento fue un poco difícil, hubo mucha incertidumbre, yo creo que fue la mejor elección.
Hoy día estoy haciendo lo que me gusta, estoy en una ciudad que quiero y recibo mucho cariño, trabajo en lo que me apasiona y me siento muy feliz.
Estás en un muy buen momento en tu carrera, ¿cuáles son tus siguientes metas?
Yo actualmente, aparte de la radio, tengo una compañía de entretenimiento, se basa en ceremonias, fotografías, lo que tenga que ver con eventos. Me gustaría desarrollarlo más, un poco más grande y hacer otros tipos de eventos, no sé llegar un día y poder hacer conferencias. Me gustaría poder expandirme en esa área y están dentro de mis sueños las inversiones. Me gustan mucho, por eso estamos ahorrando, para invertir, yo creo que ese es el futuro, las inversiones que puedan darte otro tipo de entrada, que no solo sean los medios de comunicación y seguir preparándome.
¿Cómo te conectas con la comunidad latina en New York y en Estados Unidos en general?
Tuve la ventaja de que cuando llegué a los Estados Unidos estudié, me preparé, me gradué y eso me dio la oportunidad de conocer diferentes culturas, diferentes personas de todo el mundo: Colombia, Ecuador, México, creo que eso fue lo más chulo porque me ayudó hoy día que trabajo en radio, a poder conectar con tanta gente que nos escucha. Son millones los oyentes del programa. Poder conocer su cultura, su música, su baile, la forma de hablar y mantenerme humilde y poder mantener y conocer de diferentes culturas. Creo esa ha sido la conexión que he tenido con el público que nos escucha todas las mañanas.
Por: Beatriz Oliva
Fotos: Eden Blanco @eden_blanco | Estylo Magazine