Un viaje a la cultura y la diversión
Parque del Café, una parada obligatoria en Colombia
Colombia es un viaje a lo más profundo de la diversión, con sus variadas ofertas turísticas que abarcan su cultura, sus tradiciones cafeteras y sus exuberantes paisajes. Todo esto y más forma parte de los atractivos que reúne el Parque del Café. El Parque del Café, posicionado en el ranking de los mejores lugares temáticos de Latinoamérica, está ubicado en el corazón del departamento del Quindío, el cual forma parte de la red regional denominada “eje cafetero”, donde se produce la mayor cantidad y calidad.
Colombia es uno de los mayores exportadores de café en el mundo. Esto fue una de las grandes motivaciones de las comunidades al momento de crear un Parque del Café, en el que se les muestre a visitantes locales y extranjeros, las maravillas del proceso productivo que ha logrado posicionar a este grano a nivel mundial. Cada persona que visita el parque vive una experiencia llena de diversión y adrenalina, a través de un recorrido por la cultura y las costumbres de la tradición cafetera, siendo la mezcla perfecta entre aventura, paisaje, cultura, arte, cultura, arquitectura, tradición, gastronomía, aventura y sano esparcimiento.
Este extraordinario parque es bastante completo, lo que lo hace ideal para pasar todo un día. Cuenta con dos teleféricos, 58 hectáreas de paisaje cafetero, cuatro montañas rusas, más de 35 atracciones y atractivos culturales y más de 30 restaurantes y puestos de comida. Otro punto a destacar, es que tiene atracciones para todas las edades. Para los más grandes está la montaña rusa Krater, una de las más extremas de Latinoamérica, con giros de 360 y 180 grados y con una caída de 30 metros; y para los más pequeños, está la zona de atracciones mecánicas, el lago de las fábulas dedicado al escritor colombiano, Rafael Pombo.
En la segunda parte del parque está el teleférico y 35 atracciones que están inspiradas en la diversión, arquitectura, gastronomía, historia y pasado cultural del café. En esta zona se puede ver la réplica de 1928 de la Plaza de Bolívar de Armenia, o las réplicas de las fachadas de las casas quindianas con lo que se rescató el patrimonio arquitectónico de la colonización antioqueña.
Más atractivos
Otro atractivo del parque, son las trilladoras, moledoras, tostadoras y otras máquinas de la época que fueron restauradas y de las que se explica su función. Las orquídeas, heliconias y helechos adornan el caminar, mientras que los mitos y las leyendas de los campesinos colombianos: el Mohán, la Llorona, la Patasola, la Madremonte y el Duende están reunidas en el bosque nativo.
A la entrada se encuentra un mirador de 22 metros de altura que da la bienvenida a los visitantes, y desde donde se puede observar el departamento del Quindío. Más allá de la diversión, la vista y el hermoso paisaje que rodea las instalaciones del parque, visitarlo es una experiencia gratificante que quedará en el recuerdo y que bien vale la pena tener.
Colombia, por su incalculable riqueza natural y cultural, cuenta con otros destinos turísticos que enamoran con su pasar y obligan a volver a programar una visitar a este país que promueve la sostenibilidad.
Por: Beatriz Oliva
Fotos: Facebook Parque del Café Oficial